El soldado Manning.

El soldado norteamericano Manning es vejado y sufre torturas de diverso tipo en la cárcel donde le han encerrado, por la presunta filtración a Wikileaks de los documentos diplomáticos y de todo tipo de la administración norteamericana. Los campeones, de boquilla, de los derechos humanos, de la libertad de prensa y demás zarandajas, son los que los vulneran todos con tal de defender los intereses económicos, financieros, bélicos y de dominio, de los Estados Unidos. Lo mismo da que el Presidente sea Reagan, Clinton, Bush, o este nuevo fraude de Nobel de la Paz, llamado Obama. Cuando el complejo económico militar acusa y persigue a personas o grupos, las leyes y normas jurídicas democráticas están hechas para prescindir de ellas. Así se hizo con los 5 cubanos secuestrados en las cárceles, condenados en una parodia de juicio por el sistema jurídico corrompido y de características fascistas, de los EEUU. Ese sistema que tanto valoran y glosan los conservadores y progres españoles. Denunciarlo es una obligación. Solidarizarse con Manning es otra obligación. Exigir su libertad inmediata y la de los 5 patriotas antiterroristas cubanos es un deber democrático.