El fiscal jefe del Tribunal Penal Internacional, Luís Moreno Ocampo, acompañado y secundado por Baltasar Garzón, acaba de expresar con contundencia que investigará de inmediato los presuntos crímenes de lesa humanidad cometidos por Muamar el Gadafi y los familiares y allegados corresponsables.
Hasta aquí nada que objetar ya que los crímenes siempre se deben investigar, juzgar y condenar a los autores y cómplices de los mismos. Por esa razón incontestable, pido y exijo a Ocampo y a Garzón, que investiguen por orden de calendario, es decir, los que se han cometido en primer lugar y así continuar. Le sugiero unos cuantos, sin ánimo de ser exhaustivo: A los responsables de los crímenes de la OTAN contra la población civil en la antigua yugoslavia, empezando por Solana; a los responsables políticos y militares de Israel por crímenes continuados contra el pueblo palestino; a los responsables políticos y militares de la matanza y destrucción de Irak, en primer término Bush, Blair y los demás bombardeadores e invasores necesarios, e inmediatamente los criminales cómplices Aznar y Barroso, componentes con los dos anteriores del cuarteto de Las Azores; a los responsables políticos y militares de los continuados y numerosos asesinatos en Afganistan, responsables además de una guerra imperialista, no contra el terrorismo, esto se combate de otra forma, sino por el control geoestratégico de la zona y sus materias primas.
Es muy fácil sacar pecho y decirle al imperio de la mentira,! a sus ordenes!, mucho más cuando no se trata de un estado importante. Es más difícil pero también más necesario hacerlo con los principales responsables de la charca de violencia en la que está sumergido el mundo. La credibilidad no se gana con gestos a la galería, señores Ocampo y Garzón.
Molt bé, Frutos.
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