LAS PARADOJAS DE LOS CÍNICOS, REOS DE TRIBUNALES POR CRÍMENES DE GUERRA.
El cómplice de crímenes de guerra en Iraq, que se sepa, José M. Aznar, no tiene bastante con los miles y miles de muertos que deberían pesar sobre su conciencia, si la tuviera, por su participación, junto a otros dos criminales de guerra, Bush y Blair, como mínimo, en la destrucción de Iraq, después de envenenar las mentes crédulas con sus monstruosas mentiras sobre las armas de destrucción masiva del estado iraquí, y su complicidad con el terrorismo islamista. Ahora pide ayuda para desmontar el gobierno de Venezuela que preside N. Maduro: además de criminal de guerra, golpista, conspirador con sus compadres del crimen en Venezuela o dónde sea, sacador de beneficios en la puerta giratoria o en sus relaciones con ex-gobernantes del mundo. Podría dirigirse a Felipe González en petición de ayuda, tal para cual, y los dos representantes de la ideología universal de no tener otra ideología que servir al poder económico, siempre conservador, cuando no directamente fascista, organizar una gran campaña en América Latina para rescatar la memoria democrática y social de Pinochet, tal como dijo González al compararlo con Maduro, y de todos los golpistas latinoamericanos habidos. De pasada, de acuerdo y siguiendo las órdenes de los estrategas del Pentágono y de la Casa Blanca, organizar las huestes para hacer frente a los movimientos de emancipación social y de soberanía y unidad de los pueblos de América. ¿Habrá un día en que Aznar rendira cuentas ante un verdadero Tribunal de los Pueblos por sus fechorías ? No lo sé, pero bueno es trabajar para que sea así.
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