domingo, 3 de julio de 2011

LECTURAS.

En rebelión: ¿Por qué los "rebeldes" libios no pueden tomar Trípoli?" de Basem Tajeldine y "Cuenta atrás para la invasión" de Franklin Lamb.


LA PLATAFORMA, LA PLATAFORMA, YA NO PUEDE CAMINAR, PORQUE LE SOBRA, Y SE LE VE, EL PLUMERO DE MEDRAR. PARECE UNA OPERACIÓN RUBALCABA EN TODA LA REGLA.
Y dice Antonio Gutiérrez, ex de todo y diputado del PSOE, que le gustaría que Rubalcaba, candidato solvente, conectara con los promotores del manifiesto, un manifiesto risible y falso en contenido y pobrísimo en estética. Esto sí que es hacer campaña. A ver qué le ofrecen para ir tirando bien otra temporada.
El insigne escritor Manuel Rivas, dice que se ha sumado porque para él es casi una obligación, una llamada de auxilio. Y afirma, que el manifiesto del famoseo le recuerda a EL MANIFIESTO COMUNISTA de Carlos Marx. En llegar aquí, la carcajada se oye desde Pekín. Y va de intelectual y escritor. Por favor, no desprecies la inteligencia con estas chorradas de parvulario.
Los Montero, Almodóvar, Sabina, las Pilar, Almudena, Ana Belén......, son los agitadores/as del nuevo manifiesto destinado a salvar a España y al mundo del capitalismo sanguinario y cruel, el que acaban de descubrir pudorosamente como mercados malos, cuando la Zeja, que ha aceptado todas las ordenes de esos mercados, puede perder el gobierno y muchos de ellos/as las subvenciones y contratos.
Esta nueva izquierda, tan vieja como la de sus predecesores Carrillo, Sartorius, López Garrido, Rosa Aguilar, Pedro Antonio Ríos, y demás hierbas, todos arrimados a la nómina de Ferraz y boletines de propaganda afínes, tiene una larga lista a la que recurrir para hilvanar el nuevo discurso y la acción que esperan los pueblos del mundo para romper sus cadenas. Y si tiene dificultades para recordar todos los nombres, los que acabo de citar se los pasarán ya que han sido maestros en la renovación y aireamiento de la misma charca, siempre al servicio del mismo patrón.


LAS CAJAS Y LOS BANCOS.
Viendo la cara de Isidre Fainé, Presidente de Caixabank, que dice creer en el capitalismo social, ¿les suena eso de capitalismo social, que antes era popular?, la de Rodrigo Rato, de Bankia, y la de los inversores/as de la primera fila de la Bolsa de Madrid, hay para agarrarse la cartera o echarse a correr directamente. Y eso que entre esos trajes caros faltaban muchos/as tiburones de la especulación financiera y del saqueo social. Eso sí, son modernísimos provincianos, imitan a la perfección las formas de la Bolsa de Nueva York, con ridiculo toque de campana incluido.
El solemne acto de entrar las cajas en bolsa es, según dicen, para acceder al mercado internacional de capitales, romper con la política que se había instalado en las cajas y entrar en la estricta ortodoxia financiera actuando como los bancos. Es la PRIVATIZACIÓN, se diga como se diga o se haga de la necesidad (endeudamiento por la burbuja inmobiliaria) virtud (saneamiento de las cuentas). El endeudamiento de cajas y bancos con la burbuja inmobiliaria se hizo para ganar mucho en poco tiempo, no para facilitar dinero a particulares y empresas como función del "capitalismo social".
Y luego está lo de acabar con la politización de las cajas, a causa de la presencia de las instituciones en los Consejos de las mismas. Una cosa es acabar con burbujas inmobiliarias y gastos en aeropuertos y líneas de alta velocidad que nadie utiliza, hecho para complacer la exigencia de caciquillos políticos locales, autonómicos o del centro, y otra es fortalecer el sistema financiero, tal como funciona, que es el principal responsable de la especulación y corrupción del sistema. La conversión de las cajas en bancos, en vez de ser el embrión de un sistema financiero público, es apostar a tope por las mismas políticas que crean las crisis. La foto de las imágenes innobles de las bolsas, aplaudiendo la privatización de las cajas es el símbolo de lo que debería desaparecer.

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