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viernes, 13 de junio de 2014

A MODO DE DECLARACIÓN DE PRINCIPIOS.

UNA ESPECIE DE DECLARACIÓN DE PRINCIPIOS
Me considero comunista, y republicano, y de la paz entre los pueblos, y defensor de la libertad y de todos los derechos humanos, empezando por el de la vida digna. Estoy en contra del capitalismo, no soy monárquico, si la paz entre los pueblos se tiene que defender enfrentándose radicalmente a la OTAN y a todos sus servicios criminales y genocidas auxiliares, estoy a favor de ello. De momento es suficiente ya que hoy quiero hablar de algo más concreto: de la República y del lenguaje que se utiliza desde la teórica izquierda para "modernizarse" y señalar de pasada algunas prioridades para  la izquierda que pasan casi desapercibidas en la acción social, intelectual y política regular.
EMPECEMOS POR LA REPÚBLICA: Yo soy laico hasta con el asunto de la República, basicamente porque no comparto la concepción taumatúrgica que se le da a ésta en el debate, muchas veces recurrente y coyuntural, sobre la forma de estado. No soy laico en la defensa a fondo, radical y estratégica de la democracia, de una República federal con normas y leyes pero participativa, basada en el cambio social y orientada al socialismo, algo a desarrollar desde las diversas experiencias republicanas y de la izquierda, con sus aciertos y errores.  Soy laico también en relación a las expresiones "ideológicas" basadas en voluntarismos visionarios fracasados una vez tras otra, porque nunca se basan ni tienen en cuenta la realidad, la relación de fuerzas y la práctica política. Por eso, cuando veo la compulsividad que hay después de la abdicación en torno al dilema monarquía-república, y la quietud casi monástica ante asuntos muy graves en España y en el mundo, de los que hablo a continuación, me siento desorientado.
LOS PROBLEMAS REALES de España y para España son: paro y precariedad en fase aguda; persecución y condena de huelguistas (Carmen y Carlos a 3 años por participar en un piquete en la Huelga General de 2012.  Ana y Tamara, acusadas de echar pintura en una piscina en la huelga por su convenio...); el robo perpetrado por Afal, que viene a unirse a Bankias, preferentes, Catalunya Caixa..., en el saqueo continuado de las clases trabajadoras;  la impunidad para los ricos que no tienen bastante con las leyes del capital para enriquecerse y se corrompen y corrompen; la venta al gran capital internacional de todas las empresas públicas de aerolíneas, helicópteros, carga ferroviaria, autobuses de pasajeros, cruceros..., no hablemos ya de energía, hasta el punto de no quedar practicamente nada importante de las grandes empresas públicas que no esté privatizado y en manos del capital foráneo. Y muchas más cosas de la cotidianidad española a las que debemos añadir, ya que forman parte de la misma realidad, lo que sucede en Iraq con los terroristas creados por los EEUU y la OTAN, y en Libia, y en Siria, y en Ucrania. Han creado, con la participación de España, con el acuerdo de casi todas las fuerzas políticas, y la tibia oposición de la minoría de izquierdas, monstruos que matan, destruyen y derrochan en armas y guerras el dinero que en el mundo debería servir para mejorar la vida de la gente y construir la solidaridad entre los pueblos, especialmente hacia los más empobrecidos por la rapiña. Y en España, algo que nunca se dice cuando de gasto militar se habla, el dinero derrochado por Aznar, Zapatero y Rajoy en armas y en guerra, serviría para mejorar en salud, educación, vivienda, condiciones de vida y de trabajo más dignas y no recortar derechos y servicios.
Bueno, pues esto es lo que ocurre. Ante ello debo decir que estoy empachado de un lenguaje cada vez más light y más superficial: "ciudadanía", "somos el 99% contra el 1%," "somos mayoría", "Podemos, directamente del "yes, we can" del Nobel de la Guerra Obama"...etc.
Francamente, me parece un lenguaje de literatura de aventuras para adolescentes. No me considero un "integrista" de la clase obrera, de la lucha de clases y de la revolución, ni de un lenguaje acartonado. Pero hombre, cuando los ricos del mundo y sus ejecutivos dicen, unos, o lo piensan y actúan, aun sin decirlo públicamente, la mayoría, que la lucha de clases existe y la ganan, liquidando condiciones de vida y de trabajo conquistadas por la lucha social, que vengan los letrados de la Carta de las NNUU y nos ilustren con sermones desde el púlpito de que no se trata de una cuestión de derechas o de izquierdas y argumenten que lo que se debe hacer es un programilla sobre las cosas elementales que sufre la gente y contra los desfalcos y corrupciones, para que atrape a todo el mundo, sea de derechas, de centro o de izquierdas, quedo perplejo por la reducción del lenguaje al "sentido común", ni siquiera al "buen sentido común" gramsciano. Cuando los comunistas, o la izquierda practicante, defienden algo, es obvio que lo defienden para todos los hombres y todas las mujeres que viven, o intentan vivir, de vender su fuerza de trabajo en el mercado, independientemente de a quién voten o en que partido estén afiliados. La izquierda no renuncia a crear y desarrollar la hegemonía de sus ideas y propuestas en toda la sociedad, no considera que las ideas y la hegemonía conservadoras deban ser eternas. Pero sus propuestas más concretas y elementales siempre deben enmarcarse en un proceso de cambio social, alternativo a lo actual, por más prudente e inteligente que sea la forma de defenderlo. Y esto, amigos, lleva el sello de lo que en la historia se conoce como izquierda, revolucionario,  alternativo al capital. Esto es encabezar la lucha por lo más elemental, educando sobre la necesidad del cambio.   
RESUMIENDO, creo poco, o nada, en la guerra de banderas. Para ser exacto creo en la roja como símbolo de fraternidad entre trabajadores y pueblos, a pesar de que ahora mismo, se producen graves enfrentamientos entre China y Vietnam, ambos países dirigidos por un partido comunista y con la bandera roja como enseña. Acepto la tricolor como símbolo de una IIª República que intentó modernizar social y culturalmente España, hacerla más justa para su pueblo y sucumbió ante el asalto fascista de Franco, Hitler y Mussolini. Acepto, como no podría ser de otra manera, la bandera que cada país libremente se da, por ejemplo la bandera cubana, que resume la lucha de este pueblo por su independencia y soberanía y por el socialismo. 

SIN OLVIDAR A LOS REVOLUCIONARIOS CUBANOS SECUESTRADOS EN LAS CÁRCELES DE EEUU. NI A MANNING, ASSANGE Y SNOWDEN.
  



 

lunes, 12 de diciembre de 2011

AMAIUR. NACIONALISMOS, INTERNACIONALISMO.

NACIONALISMOS, INDEPENDENTISMOS E INTERNACIONALISMOS.
Desde hace bastante tiempo no hablo sobre ETA, ni sobre Batasuna, ni sobre la recién constituída marca Amaiur. De eso ya se encargaban de hablar el PP, el PSOE y los propios independentistas, cada uno defendiendo sus intereses. A mí me importaba muy poco ese debate. Después de las elecciones de mayo y las generales del 20N, parece que para algún sector de irredentos revolucionarios de salón, que ven a Amaiur casi como el centro de gravedad de la revolución española, si no aplaudes hasta con las orejas el éxito espectacular de esa organización, coalición, o lo que sea, es que eres un maldito centralista, españolista o fascista.
Voy a hablar, aunque sea sólo por una vez, de unas cosas para mí elementales, que hasta hoy había obviado de mis escritos y urgencias. Algunos apoyos políticos, morales, y hasta ideológicos, ponen a Amaiur, antes a Batasuna, como la alternativa revolucionaria de la izquierda, válida para comunistas e izquierdismos variados. No creo en nada de eso, mi experiencia personal y colectiva, del PCE y de IU, en relación a ETA, Batasuna y otros, ha sido absolutamente negativa y ha agotado mi credibilidad. En el PCE pensábamos hace muchos años en la construcción de una izquierda vasca de orientación socialista en la que Batasuna iba a jugar un gran papel cuando se terminaran los tiros y las bombas. Nuestros contactos con ese mundo resultaron siempre un fiasco ya que a los interlocutores abertzales sólo les interesaba hablar de la independencia y de que cuando ésta se consiguiera sería el momento de hablar de programas sociales y económicos. Después de muchos años, nada, el llamado Movimiento de Liberación continuaba rozando, siempre en la imaginación, sus objetivos históricos. Posteriormente vino el Pacto de Lizarra, en el que el PCE e IU apostaron firmemente para encontrar una via política que permitiera acabar con el terrorismo, lucha armada o patriótica, dicen otros. Una pequeña anécdota poco conocida, unos meses antes de la firma del Pacto en septiembre de 1998, si no recuerdo mal, llegó al PCE un mensaje con una petición de entrevista con ETA, a la cual, discretísimamente, contestamos que sí. El interlocutor iba a ser yo. Pasaron los meses y no se supo nada; luego nos enteramos de que los contactos previos a Lizarra fueron con el PNV, tal como salió posteriormente publicado en documentos de ETA. Lo que hablaron o negociaron se tradujo, previsiblemente, en el Pacto de Lizarra, un pacto que no sirvió para avanzar hacia la paz y que fue negativo para IU como firmante, cuando ETA lo rompió reanudando los atentados. Mucho después vino el proceso de paz con el gobierno Zapatero, que ETA volvió a dinamitar con el atentado a la T4 de Barajas y la muerte de dos personas. El PCE e IU apoyaron este proceso, a pesar de los precedentes negativos. El PCE e IU denunciaron con claridad el terrorismo de estado, el GAL y las torturas, cuya expresión más brutal fue el asesinato de Lasa y Zabala, después de haberlos torturado, o el secuestro de Marey, entre otras fechorías. El PCE e IU votaron también en contra, y denunciaron, la Ley de Partidos.
A mí, personalmente, se me acabó la cuerda. Creo que ETA ha contribuido mucho a que la sociedad española se volviera más conservadora y reaccionaria en relación a asuntos tan importantes como la pena de muerte y la cadena perpetua, cuya abolición en un país con 40 años de dictadura fascista fue importante. Su acción, después de la amnistía de 1977 y del intento de golpe de Tejero, ha sido absolutamente negativa para la lucha del movimiento obrero, para avanzar hacia niveles más altos de democracia, e incluso para situar con más fuerza la lucha por la memoria histórica y juzgar el período franquista, con sus asesinatos, torturas y juicios, como ilegal, para su condena definitiva, acabando con el silencio de la transición. El terrorismo de ETA lo ha enturbiado todo, dificultando la denuncia más contundente de la etapa franquista al tener que hacer frente a la reacción popular que levantaba los atentados de ETA en la sociedad vasca y española.
Amaiur y el conjunto del abertzalismo dicen que se desenganchan definitivamente de esta etapa de "lucha armada", para defender sus posiciones politicamente. Bienvenida sea la decisión. Suerte y política, a mí no me causa ni frío ni calor. Estoy abierto al futuro. En todo caso continuaré defendiendo una España federal y republicana con orientación socialista y me entretendré poco en conocer el impulso social de Amaiur, que dice que viene al Parlamento a defender los derechos de Euskal Herría. Yo, como comunista e internacionalista, prefiero continuar defendiendo los derechos de toda la clase trabajadora, la vasca, la española, la europea, la africana, la americana y la asiática. Considero que los derechos políticos, sociales, de lengua y cultura, en Euzkadi y en el resto de España, están reconocidos y son vigentes desde hace mucho tiempo. Yo seguiré abierto al futuro para analizar y juzgar los hechos.