miércoles, 27 de abril de 2016

ES EL MOMENTO DE IU. NO DESPISTARSE. NO DEBE REPRODUCIRSE LO MISMO DEL 20 D.

NUEVAS ELECCIONES.
No tengo nada en contra de unas nuevas elecciones y eran previsibles desde enero, con sólo escuchar con un poco de atención los discursos postelectorales y a pesar de los golpes de pecho que se daban los protagonistas políticos más nombrados, fotografiados y con los discursos más intrascendentes y vacíos. Si tomamos en consideración la ocurrencia y denuncia de Pablo Iglesias y Podemos sobre "la casta", de hace unos cuantos meses, debemos acordar que no se equivocó y que su deseo inconfesado de pertenecer a ella se ha cumplido con creces. Ya tenemos más protagonistas en "la casta", y de forma especial el mismo Iglesias que, en el asunto de las permanentes,  histriónicas y variadas declaraciones sobre los problemas del mundo y de la gente, no le gana nadie. Es secundario si sus retóricas declaraciones son humo de paja sin trascendencia política, si un día propone una cosa y a la semana siguiente otra, si tiene un programa que se estira y encoge como el chicle, si se sube al cañón de Agustina de Aragón para asaltar los cielos, o se baja al reino de la restauración de Alfonso XII, de Canovas y Sagasta y el reparto del poder por etapas,  para reinventar la política, enterrar lo viejo y construir el nuevo mundo de papel. Si antes despreciaba a IU y ahora la quiere de comparsa.
Y otros personajes de "la casta" han continuado como siempre: Mariano Rajoy y su plana mayor agazapados en los intersticios de la inoperancia política, esperando que llegue de nuevo su hora, la que les dio mayoría absoluta en 2011, esta vez buscando un gran pacto a la alemana presidido por él, que es el que tiene más cosas en común con Angela Merkel; y Pedro Sánchez, la nueva estrella opaca del PSOE, no levantando el partido ni sumando votos para cumplir la función histórica que se ha autoimpuesto, derrotar al PP y salvar a España del abismo en que éste la ha dejado, alcanzando sólo a  pedir perdón por utilizar términos incorrectos con Rajoy; Albert Rivera y Ciudadanos intentan con el discurso de la responsabilidad histórica ante el pueblo ampliar su espacio electoral con votos decepcionados, o cansados, de unos y otros; poco que decir de los diversos nacionalismos e independentismos, a lo suyo como siempre que, hoy menos que nunca,  es lo mío, ni lo de las clases trabajadoras de aquí, de allá, de Catalunya, Madrid, Euzkadi, Andalucía, Galicia, Extremadura...., Portugal o Europa.  
Espero que IU no se equivoque mucho y mantenga el discurso político, las propuestas y hasta el estilo de las pasadas elecciones y no reitere su seguidismo anterior a Podemos, al grito de "a por el PP", ya que sería la mejor forma de desaparecer por etapas. Podría ser el momento de recuperar una parte del apoyo social y electoral perdido a cuenta del "novísimo proyecto" que decían representaba Podemos, que ahora busca que los votos de IU, su organización y militancia les recupere lo que han perdido. IU, agotadas las experiencias fallidas y los esnobismos de viejo cuño, podría ser una sólida base para la construcción y reconstrucción de una izquierda que consiga convencer y organizar a la mayoría  de la clase trabajadora para el cambio social que exige la actual situación. Lo cual no excluye, sino que presupone, la política más unitaria con todos los que, desde su personalidad, defiendan proyectos parecidos, de los cuales pueda salir una verdadera y fuerte unidad popular. Y esto sólo tiene un método: poner encima la mesa las propuestas que defiende cada cual, hablarlas, debatirlas, ponerse de acuerdo en todo lo que sea posible y desde cada organización defenderlo en la campaña electoral con el compromiso de cumplir e informar regularmente de su cumplimiento o de las dificultades que puedan aparecer en el momento de su aplicación. La unidad, lealtad y disciplina en el cumplimiento de los acuerdos firmados, y su defensa en las instituciones y en la calle, es la única via para construir progresivamente una verdadera y sólida unidad popular. Lo demás son disertaciones vacuas sobre la unidad popular. Y siempre, cada uno en su casa.    




LAS BASES PARA UN PROGRAMA DE IU: TRABAJO, PAZ, SOLIDARIDAD, INTERNACIONALISMO, UNA ESPAÑA FEDERAL Y REPUBLICANA.          

1 comentario:

  1. Querido camarada. Creo que sabes bien que la "confluencia" con Podemos es un puro eufemismo. Lo que todo el que no quiera estar ciego ve con claridad es que PIT se merienda a I.U., y para eso firmará lo que le pongan delante, que mañana ni se acordará. Cada día me más quedo perplejo cuando observo el nivel tan alto de ingenuidad al que ha llegado la izquierda de este país, que todavía se llama España, con perdón.
    Permíteme, por una vez, que opte por sonreír ante tanta candidez; la alternativa que me dejan es llorar. Y es que pareciera como que nada se puede, cuando la voluntad de suicidio de los más se vuelve obsesiva. Quizás tú puedas, todavía, hacer algo más que otros para evitarlo.
    Un cordial saludo.
    JR Medina

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