jueves, 12 de octubre de 2017

MANDAR AL PP A LA OPOSICIÓN Y CON ÉL AL PDeCAT Y SOCIOS, COLABORADORES DE LAS MISMAS POLÍTICAS ECONÓMICAS Y SOCIALES, ENMASCARADO AHORA POR EL DEBATE DE LA SECESIÓN NACIONALISTA.

En Catalunya y en toda España es necesario, casi imprescindible, un cambio radical que envíe a los dirigentes y gobernantes actuales del PP y del PDeCAT y aliados, a la oposición, al paro, o a sus antiguos oficios. Sería algo para empezar a recuperar la salud política, mental y el estado de ánimo. Es un problema de clase, entre la dialéctica derecha e izquierda, y es también un asunto democrático, entre democracia efectiva o autoritarismo democrático. Yo, como comunista y con voluntad de cambio, defiendo una alternativa unitaria desde la izquierda, pero tengo un problema, veo difícil esta alternativa con lo que hay. El PSOE, aunque parece ser algo más coherente en los últimos tiempos, no acaba de despegar como fuerza socialdemócrata no "revolucionaria" pero sólida. Y el pupurri Unidos Podemos y su sucursal Catalunya Sí que es Pot, visto lo visto y su permanente divagación errónea y errática sobre asuntos fundamentales de la vida social y de la convivencia, poca confianza inspira.
-Iglesias y Martínez la patética quita-banderitas en el Parlament.
-Rabell, el jefe de CSQEP, debe estar felicitando a Junqueras.
-Nuet, el corrupto político y gran vividor a costa de lo que sea. 
-Fachín, otro que tal en la tarea de degradar lo que quedaba de izquierda.
-Faltan Garzón y Centellas, dos subalternos de la tropa progre, que pintan poco.

ALGO TENDREMOS QUE IR HACIENDO, MANQUE CUESTE. Paco Frutos.




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