CUANDO LA VIDA, LA POLÍTICA, LAS IDEAS DE CONVIVIR COLECTIVAMENTE EN ARMONÍA Y EL CORAJE PARA DEFENDERLAS, SE MEZCLAN CON LAS PALABRAS Y LA POESÍA, NACE UNA SENSIBILIDAD RICA EN BELLEZA Y EN FRATERNIDAD HUMANA.
En cualquier lugar del mundo, en el sitio más bonito, más monumental, más salvaje o escabroso, o en la calle corta de una aldea, barrio, aledaño, paisaje que recuerda al Cervantes viajero, puede nacer lenguaje y poesía y esparcirse como bálsamo de palabras sobre las diversas sensibilidades humanas, siempre que éstas no sean ciegas y sordas y hayan decidido por inercia mental estar ausentes de la pequeña o gran creación, es igual, la que impulsa el conocimiento y comprensión de la belleza en sus variadas expresiones y eleva la sensibilidad humana, el deseo de convivir y compartir bienes materiales y espirituales, frente al impulso irracional de poseer y dominar, Y gradualmente, ser capaces de organizar el mundo y sus relaciones colectivas y personales desde la fraternidad, aunque este término suene raro, extraño y hasta provocador, a los que sólo aspirar a tener, al precio que sea y caiga quien caiga. He intentado expresar un sentimiento sobre la belleza natural y la creada por las personas, para que acompañe al imprescindible lenguaje duro de denuncia del capital, sus instrumentos y métodos de dominación y anulación del pensamiento libre y crítico. Para que sea inseparable de la acción infatigable para conquistar con la unidad y organización, la convicción y la voluntad una vida digna para todos los pueblos y personas, sin dejarse acallar por la represión y por las leyes mordaza que persiguen y condenan a duras penas a sindicalistas, trabajadores y Jóvenes, por el sólo hecho de defender sus derechos al trabajo y a unas condiciones laborales y sociales justas. En la perspectiva y horizonte no perder nunca de vista que es urgente y necesario un proyecto socialista, como única forma de organizar unas relaciones humanas justas.
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