ACERCA DE UN ARTÍCULO DE JAVIER CERCAS SOBRE LAS TONTERÍAS DE ALBERTO GARZÓN EN RELACIÓN AL CARRILLISMO. 

Al flamante charlatán que ejerce de Coordinador General de IU no se le ocurre otra cosa para apoyar a su jefe Pablo Iglesias frente a Iñigo Errejón, en la pugna que estos mantienen en Podemos, que decir que el populismo de Errejón comete el mismo error que el eurocomunismo de Santiago Carrillo. Y añade que el PCE ejerció de izquierda domesticada, al igual que hace el podemita Errejón.

Cuando uno no sabe de lo que habla lo mezcla todo sin entender nada, coincidiendo con cuatro descerebrados "ultra izquierdistas de salón", que están haciendo revoluciones semanales desde hace 70 años, aunque cada vez más diezmados porque muchos de sus colegas se pasaron al PSOE o se fueron al sofá. O también con otros que creyeron que aquello era coser y cantar y luego comprobaron que era más complicado. Yo también pensé que avanzaríamos más y más deprisa. Pero la realidad es la que es. Y por ello, una cosa es la crítica razonada y concreta a lo que visto en la perspectiva de 20, 30 o 40 años se considera erróneo y otra es liquidar todo un proceso histórico y a sus protagonistas. Y aunque Santiago Carrillo jugó un papel importante en la transición, a pesar de haber actuado siempre desde el exterior, había otros protagonistas de su edad y con gran talla dirigente que habían actuado siempre desde la clandestinidad interior y que, junto con miles de comunistas actuando en fábricas, barrios, universidades y en la calle, y pasando algunos de ellos años en la cárcel, habían sido los protagonistas principales de la lucha antifranquista, por las libertades y por la mejora de las condiciones de vida. Romero Marín, Armando López Salinas, Tomasa Cuevas, Marcelino Camacho, Marcos Ana, Gregorio López Raimundo, Clotilde Ballesteros, Trifón Cañamares, Victor Díaz Cardiel...., son, entre otros muchos, los grandes protagonistas de una lucha en solitario en los momentos duros y que posteriormente participaron y aprobaron el proceso de transición, con todas sus concesiones, fruto del fracaso de la ruptura democrática y la entrada en una negociación política compleja. Calificar esta etapa de carrillista sin más, sólo puede hacerlo un miserable cuyo único mérito de lucha es haber levantado las manitas en las plazas del 15 M, y que si hubiera vivido algunos momentos de extrema tensión de aquellos años, en los que te la tenías que jugar de verdad, quizás habría desaparecido como un conejo de la escena. ¡Qué valientes son algunos en el tiempo!

Los que en aquellos años polemizamos con Carrillo, y con su forma de dirigir autoritaria y oportunista, y con algunas de sus decisiones y actuaciones, estamos hartos de que cuatro niñatos que no habían nacido y otros que reinventan la historia a su comodidad, nos vengan a dar lecciones revolucionarias, cuando lo único que han hecho hasta ahora es ver cómo se situaban de cara a formar gobierno, con el PSOE que sea, o con los independentistas de derechas o de centro, es igual. O, en el caso de Garzón, que acompañado de sus porta maletas Centella, Aguilera, Sánchez y demás socios, ha hecho en IU la purga más grande, la que Carrillo nunca se atrevió a hacer ni en cantidad ni en métodos empleados.  

JAVIER CERCAS EMPEZÓ Y TERMINÓ SU ARTÍCULO DICIENDO "EL QUE NO SABE DE DÓNDE VIENE DIFICILMENTE SABE A DÓNDE VA", REFIRIÉNDOSE A GARZÓN. PUES ESO.

(Sin compartir algunas de las conclusiones de Javier Cercas en su artículo de El País Semanal, creo interesante su argumentación).