viernes, 1 de abril de 2011

Wanted. Se buscan.

El Tribunal Penal Internacional ha recibido el encargo de la Comunidad Internacional, para ser claros y no engañarnos, la OTAN y su brazo político la ONU, de investigar y juzgar los crimenes cometidos en Libia, entendiéndose que los criminales eran Gadafi y su camarilla. Parece ser que los llamados rebeldes salieron a la calle con las armas a repartir flores y besos, tal cual los pintan la mayoría de mercenarios y enviados especiales de todos los medios de comunicación y propaganda. Propongo a los más altos representantes del Tribunal Penal Internacional
que añadan a su objetiva y laboriosa lista a las siguientes personas, sin ánimo de ser exhaustivo:
Nicolás Sarkozi, Presidente de La República Francesa.
David Cameron, Primer Ministro del Reino Unido.
Barak Obama, Presidente de EEUU y Premio Nobel de la Paz.
Hillary Clinton, Secretaria de Estado de EEUU.
Silvio Berlusconi, Primer Ministro de Italia.
José Luís Rodriguez Zapatero, Presidente del Gobierno de España.
Trinidad Jiménez, Ministra española de Exteriores.
Carme Chacón, Ministra española de Defensa.
Anders Fogh Rasmussen, Secretario General de la OTAN.
Ban Ki Moon, Secretario General de la ONU.
Manuel Durao Barroso, Presidente de La Comisión Europea.
Y para que no quede ninguna duda ni sombra, que Ocampo y Garzón investiguen a todos los gobiernos comprometidos en la guerra humanitaria, en especial a los jeques y principes del Golfo. Esto de momento ya sirve para empezar. Se les tendrá que ir interrogando para que vayan explicando sus decisiones e informar acerca de los máximos responsables y ayudantes, civiles y militares, que han contribuido a la humanitaria tarea de proteger vidas e imponer la paz a bombazos. Que expliquen cuántos militares y civiles han muerto con sus bombas.
Toda esta investigación sobre los hechos actuales no puede lavar ni tapar todos los crimenes cometidos en Serbia, Irak, Afganistán, ni indultar a los criminales. Pero, de momento, ante la diligencia de Ocampo y Garzón en tomar en sus manos el asunto libio, ayudémosles en su benéfica acción en defensa de los Derechos Humanos. Por algo se empieza.

1 comentario:

  1. muy bien ¿para cuando una plataforma como se hizo con Aznar ?

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