En el mismo día que se pretende echar de la casa donde vive de alquiler desde hace 30 años a una mujer de 85 años, con una pensión inferior a 400 euros, por no haber pagado los dos últimos meses, Santos González, Presidente de la Asociación Hipotecaria Española (AHE), que engloba a bancos, cajas de ahorros y cooperativas de crédito, asociación que controla el 80 por cien del mercado de préstamos para la compra de viviendas, ha declarado que su organización está en contra de la dación en pago porque "perjudicaría la credibilidad de España como país y la viabilidad del sistema financiero". Decir esto, cuando se ha pasado de la champions del pelotazo a la indigencia del limosneo ante Merkel, es algo para avergonzar a quien todavía tenga vergüenza.
Cada vez me reafirmo más en mi opinión de que en este país, y en otros, hay muchas personas sueltas y con mucho poder que son carne de presidio. Los individuos que han contribuido jurídica y personalmente al desastre financiero, económico y social que vivimos son los mismos que ahora se oponen a tibias medidas para reducir los daños causados y quieren continuar imponiendo sus nefastos medios de enriquecimiento a costa del trabajo y las privaciones de la mayoría. Cuando las burbujas financieras y mobiliarias estaban en pleno apogeo y cualquier persona con un mínimo de sentido común se daba cuenta de que aquella locura iba a explotar de la noche a la mañana, los jerifaltes de cajas, bancos y cooperativas de crédito y la AHE, su plataforma de tropelías, iban poniendo más madera a una máquina a punto de explotar, compitiendo entre sí para ofrecer más créditos y más hipotecas a, desgraciadamente, tantos necesitados, o incautos, que se creían sus mentiras. Y así estamos. La AHE está en contra de una ley para intentar paliar moderadamente los efectos sociales devastadores de la situación, cuando, si tuvieran un poco de decencia, la apoyarían o, al menos, se callarían. Termino diciendo que es imprescindible ir mucho más lejos de lo que pretende esta ley, algo que no voy a desarrollar hoy.
24 SAHARAUIS CONDENADOS A PENAS MONSTRUOSAS.
Un Tribunal Militar del régimen de Marruecos, ha condenado a 24 saharauis a penas que van de cadena perpetua para 8, 30 años para 4, 25 años para 8 y el resto a condenas varias, acusados de "formación de banda criminal", "violencia contra la fuerza pública, con resultado de muerte" y "mutilación de cadáveres", durante el desalojo violento por parte del ejército y la policía de miles de personas del campamento de Gdaim Izik, que exigían del gobierno marroquí mejoras sociales y en sus condiciones de vida. Los condenados han denunciado haber sido torturados para arrancarles las confesiones, algo que el juez se negó a investigar. Abogados y asociaciones marroquíes han defendido con firmeza a los saharauis, quedando tanto ellos como los observadores internacionales perplejos ante la dureza, sin ninguna prueba, de las penas. Un acto más de barbarie del reino de Marruecos con el pueblo saharaui que, hoy más que nunca, necesita de nuestra solidaridad y de las acciones más contundentes en la calle y en los parlamentos español y europeo para que se anulen las condenas y se reinicien las conversaciones congeladas por Marruecos, verificadas internacionalmente, para una definitiva solución del problema. Y maldigo a todos estos medios que gastan resmas de papel para hablar de "las damas de blanco" cubanas, a las que nadie ha torturado ni condenado y no tienen ni un folio para estos 24 defensores del derecho de su pueblo a la soberanía.
PATRICIA RIVAS, PERIODISTA. ¿ A QUIÉN SIRVE ?
He leído un artículo de Patricia Rivas, que con el pomposo título de "Los medios alternativos frente a la inseguridad informativa", aparentaba ser un documentado ejercicio contra los grandes medios del sistema, que mienten y manipulan, y en defensa de los medios alternativos, de la izquierda por supuesto. El artículo, largo y documentado con citas, descalificaciones y lugares comunes, parece antiimperialista, anticapitalista, revolucionario, defensor de las procesos revolucionarios latinoamericanos. Sólo hasta llegar a la mitad del mismo en el que toda la paja inicial se desvanece y deja paso a la cruda realidad del "periodismo alternativo" de la señora Rivas. El núcleo central del mismo queda descarnado, no es el imperialismo el que hace guerras imperialistas de saqueo económico y de dominio territorial en el norte de África y en todo el continente, sino que eran tan malos, malos, Gadafi y Assad, que se pusieron en marcha procesos revolucionarios genuinos para liberarse de ellos y crear una verdadera democracia revolucionaria. El trabajo de Patricia Rivas es peor que un informe conjunto de la OTAN, de los EEUU y de la UE ya que puede engañar más a los incautos o crédulos de izquierdas desde su izquierdismo de salón. El artículo se publica en Rebelión, como muchos otros de la autora, el boletín del inefable Santiago Alba Rico y va en la misma línea del "periodismo alternativo" de éste. Yo creo que la autora podría pedir salario a Obama, Camerón o Hollande, por la ayuda desinteresada que les presta. Hay que ver la poca diferencia que hay entre el periodismo oficial del régimen y el pretendidamente alternativo.
Y PARA QUE NO SE OLVIDE, LIBERTAD PARA LOS 5 PRISIONEROS CUBANOS DE OBAMA.
PATRICIA RIVAS, PERIODISTA. ¿ A QUIÉN SIRVE ?
He leído un artículo de Patricia Rivas, que con el pomposo título de "Los medios alternativos frente a la inseguridad informativa", aparentaba ser un documentado ejercicio contra los grandes medios del sistema, que mienten y manipulan, y en defensa de los medios alternativos, de la izquierda por supuesto. El artículo, largo y documentado con citas, descalificaciones y lugares comunes, parece antiimperialista, anticapitalista, revolucionario, defensor de las procesos revolucionarios latinoamericanos. Sólo hasta llegar a la mitad del mismo en el que toda la paja inicial se desvanece y deja paso a la cruda realidad del "periodismo alternativo" de la señora Rivas. El núcleo central del mismo queda descarnado, no es el imperialismo el que hace guerras imperialistas de saqueo económico y de dominio territorial en el norte de África y en todo el continente, sino que eran tan malos, malos, Gadafi y Assad, que se pusieron en marcha procesos revolucionarios genuinos para liberarse de ellos y crear una verdadera democracia revolucionaria. El trabajo de Patricia Rivas es peor que un informe conjunto de la OTAN, de los EEUU y de la UE ya que puede engañar más a los incautos o crédulos de izquierdas desde su izquierdismo de salón. El artículo se publica en Rebelión, como muchos otros de la autora, el boletín del inefable Santiago Alba Rico y va en la misma línea del "periodismo alternativo" de éste. Yo creo que la autora podría pedir salario a Obama, Camerón o Hollande, por la ayuda desinteresada que les presta. Hay que ver la poca diferencia que hay entre el periodismo oficial del régimen y el pretendidamente alternativo.
Y PARA QUE NO SE OLVIDE, LIBERTAD PARA LOS 5 PRISIONEROS CUBANOS DE OBAMA.
"Rebelion.org" debería llamarse "Qatari.org", porque en buena medida es el boletín del sultanato de Qatar y un apéndice de Al Jazeera. Eso no impide que también haya buenos artículos y buenos autores en esa página, pero la línea editorial la marca el emirato. Eso explica por qué "Rebelión.org" presta siempre su apoyo a la reacción fundamentalista islámica en contra del panarabismo laico y progresista, como el representado por el gobierno de Assad en Siria o por el defenestrado Gadafi en Libia.
ResponderEliminarEl espectáculo que está dando en España la oligarquía financiera y terrateniente y sus mediocres y corruptos lacayos del PP, el PSOE, CiU y PNV es sencillamente nauseabundo. Hace poco, el banco francés Natixis decía que una de las causas que impiden que España salga de la crisis es que aquí las empresas están obteniendo más beneficios que en ningún sitio pero los están colocando fuera de nuestra economía, en paraísos fiscales. O, lo que es lo mismo, España presenta uno de los niveles de fraude fiscal más elevados del mundo supuestamente "desarrollado", y ese fraude corresponde en su casi total integridad a los grandes oligopolios, esos mismo oligopolios cuyos intereses defienden con uñas y dientes los políticos del PP y el PSOE, entre otros. ¡Ése es su patriotismo de pacotilla!